sábado, 25 de agosto de 2012

SAN LUIS, El protector

San Luis, rey de Francia (1215-1270) es el Protector de la OFS.
Para nosotros, hijos de una cultura cautiva del subjetivismo y con unos ojos parapetados tras los cristales de la sospecha y sucios de interés, no encontramos mucha relevancia en su figura ( como tampoco en otras tanto o más significativas, claro).
¿Cómo podríamos entender, por ejemplo, que después del vencer con las armas a Enrique III, de Inglaterra, le entregase Cahors y Périgueux, con tan solo la esperanza de ganarlo por su generosidad?
Buscó como pocos el vínculo entre misericorda y fidelidad, entre la justicia y la paz. Y lo halló y se esforzó por conservarlo. Su misma muerte fue propiciada por ese deseo incansable de buscar el bien y el entendimiento.
En unos momentos en los que la institución familar esta siendo tan atacada (precisamente para debilitar al sujeto en su conciencia) es muy motivadora una mirada viendo que su familia fue gérmen, sostén e inspiración para su persona.
Luis y su primo, también rey, Fernando, otro franciscano insigne,  son los reconocidos, pero las figuras de sus respectivas madres Blanca y Berenguela deberían ser enmarcadas junto con sus mencionados hijos para poder entender y admirar unas vidas ejemplares.
Es verdad que también encontramos sombras en guerras y batallas pero es precisamente en el claroscuro de las miserias y grandezas humanas donde emergen las grandes figuras señeras de la Humanidad.

  ¡Gloria y bendición al solo Dios sabio, que renueva los antiguos prodigios y repite los portentos para consolar con nuevas revelaciones las mentes de los débiles y para que por obra de las maravillas visibles sean sus corazones arrebatados al amor de las invisibles!  1Cel. 114.

No hay comentarios:

Publicar un comentario